ARSENIO "EL CHIQUITO" FOURCADE
Si usted se crio futbolísticamente a principios de los noventa recordara aquel delantero de Platense conocido como “El Chiquito” Benítez.
Lo que no muchos saben es que por esa época existía también un nueve aun mas grande que el (en tamaño) y que jugaba en San Lorenzo.
Arsenio “El Chiquito” Fourcade nunca llego a debutar en primera.
El Chiquito Fourcade nació en “El Hoyo” provincia de Chubut. A la edad de 5 ya jugaba al futbol y era un niño como cualquier otro. Pero todo empezó a cambiar en su cumpleaños número 6 cuando luego de un día agitado entre bicicleteadas y futbol con sus amigos llego a su casa con dolor de piernas.
Le dijo a su madre que le dolía la parte posterior de sus piernas a lo que su madre le contesto un simple “Estas creciendo Arsenio…”
Y lo que podía ser una mentira piadosa de una madre para que su hijo no le rompa las pelotas termino siendo verdad. Así comenzó el crecimiento de Arsenio.
Ya para las 12 años Arsenio media 1,85 y sus padres ya habían visitado toda clases de especialistas, hasta que desesperadamente cayeron en manos del Cacique Vergalonga el cual más que darle una solución los espanto “Su hijo mínimo va a medir 2.30” Los padres ya no sabían qué hacer, así El Hoyo le quedo chico y Arsenio decidió partir.
Una vez en capital fue a probarse en Ferro pero para jugar al básquet, como era medio torpe con las manos no quedo (en el futuro esta torpeza le traería problemas con las mujeres) y por esas cosas de la vida se probo en San Lorenzo pero para jugar al futbol. Allí quedo y le fue bien en inferiores, hacia goles todos los partidos y casi todos de cabeza, el problema eran las recurrentes lesiones que tenía.
Pero ese no fue su impedimento para debutar en primera, el día que lo convocaron al primer equipo Arsenio ya media 2,20 y cuando fue a ponerse la camiseta, esta le quedaba un tanto ajustada pero a el no le importo. Ya cuando el equipo estaba por ingresar a la cancha, Arsenio estaba nervioso tanto que quiso entrar corriendo sin darse cuenta de que el túnel estaba muy bajo. Le dio de lleno a una viga y se desmayo.
Estuvo 6 meses en coma y para cuando despertó el futbol ya estaba muy lejos de su vida, si bien formo parte de aquel plantel campeón del 95 nunca llego a jugar.
Hoy vive en el Hoyo fabricando dulce casero de rosa mosqueta, está casado con la hija del cacique Vergalonga y tiene dos hijos. El futbol es tan solo un recuerdo lejano del cual conserva memorias y esta figurita.
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