Adalberto Al Jassim – Al Shabab (Arabia Saudita)
Adalberto Al Jassim nació en la localidad bonaerense de Florencio Varela, nieto de Árabes, Al Jassim trabajaba en el negocio de ropa de la familia, igualmente él quería dedicarse al futbol y hacerse millonario según sus palabras… por eso jugaba en las inferiores de Defensa y Justicia.
Adalberto era un volante por izquierda de buen pie y gran recorrido por la banda, se le veía futuro y fue convocado a la selección Sub-15 de Argentina para un triangular sudamericano a disputarse en Chaco. Allí el nivel de Adalberto Al Jassim fue muy bueno.
Da la casualidad que por ese entonces había una misión de jeques de Arabia Saudita buscando petróleo en la provincia de Chaco, la misión fue un fracaso y como entretenimiento llegaron al torneo Sub-15, allí vieron a la selección Argentina y a Adalberto en cuestión.
Los jeques deslumbrados con el chico que para colmo tenía descendencia árabe lo siguieron a Buenos Aires para contratarlo inmediatamente.
Los jeques llegaron al local de la familia Al Jassim y allí hablaron el padre del pequeño Adalberto, Juan Carlos Al Jassim, quien accedió a que su hijo retorne a la tierra de sus abuelos a jugar al futbol tras ver un cheque de 5 cifras en verde. Igualmente los jeques imponían una condición y esa era que Adalberto pase una prueba en Arabia dentro de 15 días. Todo fue acordado entre el padre y los jeques, cuando estaban por salir uno de los Jeques se queda observando la vidriera del local y dice “una remera Adidas a tan solo 20 pesos, es un gran precio” y él para nada lento Juan Carlos le dijo… llévela nomas Jeque, es un regalo. Obviamente la remera no era original si no que la hacia la familia Al Jassim en el taller ilegal que tenían en el fondo del local.
Y así fue que Adalberto junto con su padre viajaron hacia medio oriente. Si bien solo llevaban poca ropa porque eran una visita de 5 días nada más, el padre de Adalberto cargo otra valija con ropa para vender.
En la prueba todo salió perfecto y Adalberto firmo con el Al Shabab, su padre por su parte no miraba la prueba de su hijo y se fue a vender toda la ropa trucha que tenía en el bolso por todo el club, éxito masivo de compras.
El retorno a la Argentina trajo a padre e hijo con los bolsillos llenos de verdes, lo cual sirvió para agrandar el taller ilegal y comprar nueva maquinaria y sobornos con la policía obviamente (un taller ilegal no se oculta así nomas).
Mientras Adalberto ya jugaba en primera siendo tan joven las idas y venidas de Argentina a Arabia y viceversa se hacían continuas… padre e hijo aducían que debían volver al país por “temas familiares” y siempre retornaban de Argentina con dos o tres valijas. Cuando no había partido o entrenamiento padre e hijo recorrían Riyadh vendiendo remeras, pantalones y hasta hacían camisetas de futbol truchas para vender a precio original. Los Árabes compraban como locos esa mercadería supuestamente original a precio regalado!
Pero la ambición es peligrosa a veces y durante una fecha de la Copa de Campeones de Asia en Tokio, Juan Carlos y Adalberto Al Jassim fueron arrestados por la policía Nipona por venta de indumentaria ilegal en las calles de Tokio. Ese fue el adiós.
Hoy Adalberto Al Jassim y su padre Juan Carlos Jassim están presos en la cárcel japonesa de Fuchu cumpliendo condena… igual Adalberto es la figura de la selección de futbol de la prisión.
Así fue la breve carrera del Árabe de Florencio Varela.
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